
En el 2008 he tenido muchos buenos ratos, y pocos malos. Una subida progresiva y mientras unos polos opuestos que cada vez están más lejos. Días de estudio y biblioteca de agobios y selectividad. Un concierto especial y un viaje a Mallorca. Y a la vuelta descubrir de qué va la complicidad secreta. Calor, y casas vacías para invadirlas. Jet Extender y madrugadas. El doble de dos y dos al cubo. 'El día que se murió mi iPod'. Cervezas y cafés con amor. Y cartas. Las dos (o tres) 'pes' : pitis, p..., p... Un colegio que no era el mío. Zombie de the Cranberries. Gasolinera y batidos de chocolate de madrugada. Navacerrada o estar sin estar. Pillar autobuses o trenes y alguna locura. Reunir céntimos y conseguir 7 pavos para lo que más nos apetecía y luego que llegue el mareo. Descubrir que en un 'novio' encuentras a un 'primo' y muchas más cosas. Y sonríes... De ánimos, de 'te lo dije' y 'me alegro' y de... dar las gracias. De 'black holes and revelations'. Y domingos de lavadoras y Chuequeo y confesiones con un casi-desconocido. ¡Ah! y un perro. Si destaco una noche, creo me quedo con una de octubre. Lo mucho que odio la frase 'una nueva etapa' y lo cierta que es. La urjc. 'Dos tigres corren...' los martes y jueves por la tarde, ya se sabe. Una interrogación y muchos abrazos.
Vosotros.
Ellos.
Y joder... odio estas mierdas de recordar movidas, pero he empezado a pensar y se me ha hecho imposible resistirme.
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